A mí lo que siempre me ha fastidiado mucho es ver que se miden cosas que no sirven para nada, que además se sabe que no sirven para nada porque el dato se da sólo para contentar al auditor o al jefe de turno, primándose sólo el hecho de medir, a veces de abrumar con datos, más que el interés de los mismos, o la consideración de si existe capacidad para gestionarlos. Vamos, que se tiene intención de confundir con los datos (por varios motivos, rara vez alguno bueno) en lugar de aclarar, de conocer, no digamos ya de aprender. Del río revuelto de los datos salen extraños pescadores ganando…
↧